Más de 1300 personas visitaron el Ángeles Alvariño en Vigo
21/03/2017
Las jornadas de puertas abiertas organizadas con motivo del Centenario del Centro Oceanográfico de Vigo del IEO han sido un gran éxito
Un grupo de escolares en la cubierta del Alvariño recibe explicaciones sobre el funcionamiento de la roseta oceanográfica
Con motivo del Centenario del Centro Oceanográfico de Vigo del Instituto Español de Oceanografía (IEO), el buque oceanográfico Ángeles Alvariño –uno de los más modernos y sofisticados de España- abrió sus puertas a la sociedad en el Puerto de Vigo durante toda la pasada semana.
Por la mañana el buque acogió la visita organizada de colegios e institutos de la ciudad mientras que por la tarde se abrieron las puertas a todos los públicos.
El recorrido por el barco incluyó la visita al puente de mando, cubierta, laboratorios y zonas de trabajo, así como el comedor, la cocina y los camarotes, y se ofreció una visión completa de la instrumentación y equipos que se utilizan en las campañas oceanográficas, y también de cómo se trabaja en un buque de investigación oceanográfica y cómo viven a bordo quienes en él laboran.
En todo momento lo visitantes estuvieron acompañados por personal de la tripulación, que actuaron de anfitriones.
La visita al barco se complementó con una exposición divulgativa instalada en la nave El Tinglado, cerca del barco. Allí se presentaron los equipos que se emplean a bordo, qué información se recoge, cómo se interpreta y se aplica ese conocimiento, así como curiosidades de la vida del personal científico en el mar. Además, en el muelle se instaló un contenedor acondicionado como laboratorio cuyo interior se mostró al público.
Personal de las principales líneas de investigación del Centro Oceanográfico de Vigo del IEO respondió a las preguntas y aportó sus explicaciones sobre diversos temas, como los ecosistemas profundos, los recursos vivos y la pesca, la oceanografía y la contaminación, el plancton y las mareas rojas. Además, se pudo visitar una muestra del instrumental antiguo que se utilizaba antaño en las investigaciones oceanográficas. Los visitantes pudieron también llevarse un recuerdo de su visita haciéndose una instantánea en un photocall, que se instaló en la nave El Tinglado.
En total visitaron el barco 1315 personas y se calcula que cerca de 500 se quedaron sin poder ver el buque por cuestiones de aforo y solo pudieron visitar la exposición.