Crónicas para un centenario

CRÓNICAS PARA UN CENTENARIO 24 Soler, y de los profesores de aquel Centro hemos recibido singulares atenciones 29 . Al presentar los resultados de los trabajos de química, Ipiens agradece también las facilidades concedi- das por el Director de la Escuela Industrial, D. Rafael de la Piñera 30 . 29 Buen, O. de, 1916 b. 30 Ipiens Lacasa, 1916. En 1916 López Soler continuó la toma de datos de temperatura del aire y del agua de la ría de Vigo. LOS FANGOS DE SAN SIMÓN Las primeras observaciones sobre los sedimentos fangosos de la ensenada de San Simón, en la ría de Vigo, las hizo Odón de Buen durante una campaña por las rías gallegas en el verano de 1916. Unos días después de finalizar la campaña adelanta sus primeras impresiones: “ En lo más interior de las rías bajas, pero principalmente en la de Vigo, el fondo está formado por un fango podrido, mal oliente, abundante en sulfhídrico, estéril, nada propicio para la vida de los peces y menos propicio para su reproducción. Alguna medida convendría tomar que evitase el influjo insalubre de este fondo. Es probable que se vaya extendiendo la zona podrida cada vez más y amenace la vida de los peces, crustáceos y moluscos sedentarios.” En diciembre, después de haber estudiado los datos de la campaña manifiesta: “ En las capturas de fondo, que fueron numerosas, notamos desde el primer día que en algunas zonas, las más interiores de la Ría de Vigo, el fango extraído tenía evidentes señales de putrefacción; olía fuertemente a huevos podridos. El profesor Ipiens determinó el ácido sulfúrico de las aguas en contacto con esos fondos podri- dos y obtuvo cifras algún tanto alarmantes; hasta cerca de 1 por 1.000 en algún caso. Es un fenómeno de excepcional importancia, que no debe despreciarse, la putrefacción de esos fon- dos, precisamente en algunas zonas del puerto y en derredor del Lazareto de san Simón. Este es un verda- dero sanatorio, admirablemente situado, de pintorescos panoramas, pero rodeado de podredumbre…. Sin duda el agua no se renueva en aquella zona; los movimientos no son bastante intensos para limpiar los sedimentos fétidos…. Y no basta para sanearlos ni la acción bacteriana, ni la de los anima- les invertebrados que en tales fondos viven. Y es seguro que la putrefacción irá avanzando, haciendo estériles las aguas paramuchas especies que solo visitan las zonas limpias, bien agitadas, con suficiente oxígeno, sin gases nocivos. Esas rías gallegas caminan, en su proceso de esterilidad, hacia la triste situación en que se encuentra, por ejemplo, el Mar Negro”. Esta alarmante descripción sobre la evolución de la ría de Vigo, fue motivo de preocupación y estudio para otros investigadores. Sólo unos años más tarde el profesor Ipiens, responsable de las determinaciones en la campaña de de Buen, relativizaba la importancia de la presencia del sulfhí- drico. Sin entrar a considerar las causas, describe la presencia de indicios de gas sulfhídrico en las proximidades de Redondela y del Lazareto, en el fondo de la ría, pero también en otras regiones más externas. A su juicio sólo una mínima parte de los gases podía ser ácido sulfhídrico, que podría estar acompañado por metano y otros hidrocarburos. Cerca de 30 años más tarde las observaciones efectuadas por varios investigadores parecen se- guir desmintiendo las predicciones de Odón de Buen. En su amplio estudio sobre los yacimientos de moluscos de la ría, realizado en los primeros años 40, José Mª Navaz destaca la existencia de ex- tensos arenales emergentes en la ensenada de San Simón, surcados por canales de agua dulce de los cauces fluviales, por los que llegan arrastres fangosos: “ La arena fangosa y el fango predominan en algunos fondos, haciéndose más patentes a partir del estrecho de Rande; y ya en la ensenada de San Simón, los playales de arena conchífera y algo fangosa acentúan la tendencia al predominio del fango en el fondo de la ensenada. Las playas de arena fina y limpia, como la de Cesantes, alternan con zo- nas de arenas enfangadas, como la que los mariscadores conocen como “lago morto”. Continúa Navaz: La homogeneidad de este biotopo natural, que es la ría de Vigo, se refleja en la di- fusión por todo su ámbito de las mismas especies de moluscos.... El exceso de fangos, aportado por los ríos, perjudica, por lo general, a todos los moluscos; pero unos sonmás resistentes y se acomodanmejor que los otros a este régimen, más o menos adverso según las temporadas… .

RkJQdWJsaXNoZXIy MTQwOQ==